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En los últimos meses he hecho un estudio sobre todos los niños y adolescentes que trato en consulta con problemas de salud y en particular de la columna vertebral. Este estudio ha consistido en una sola pregunta; Pregunté a sus padres: ¿su hijo/hija ha gateado siendo bebé? Todos tenían una respuesta en común: no. Esta es la razón por la cual este mes he decidido escribir sobre la importancia de gatear en el desarrollo de un niño sano. Gatear o caminar con las cuatro extremidades ademas de normal es necesario. Logra dos objetivos principales:
1. Desarrollo neurológico apropiado del cerebro y del sistema nervioso:
Cuando un bebé nace, su cerebro se compone básicamente de millones y millones de células nerviosas, llamadas neuronas, que no están conectadas entre si. Las últimas investigaciones científicas demuestran que a través del movimiento, especialmente con el acto de gatear, estas neuronas se estimulan, se conectan entre si y es así cómo nuestro sistema nervioso se forma. Esto permite que el cerebro controle procesos tales como comprensión, concentración y memoria.
La mielina es lo que cubre las células nerviosas y permite la propagación apropiada de los impulsos nerviosos. Al nacer, los nervios no tienen mucha mielina, y es con el desarrollo de movimientos tales como gatear cuando el fenómeno de mielinización ocurre.
El gatear también desarrolla la coordinación mano/ojo. El niño, observando su entorno determina dónde quiere ir y activa un dispositivo apropiado en su cuerpo para esa finalidad. Esto como respuesta permite al niño desarrollar el equilibrio, y percepción del espacio con el fin de explorar el mundo de su alrededor. Estimula el oído interno especialmente a través de los movimientos primarios infantiles que marcarán su equilibrio final.
Gatear, siendo un movimiento lateral cruzado (cuando la mano derecha va hacia delante, la rodilla izquierda va hacia delante y viceversa) desarrollará la comunicación apropiada entre los hemisferios derecho e izquierdo del cerebro, que es esencial para una función óptima del cuerpo. Al mismo tiempo desarrollará ambos hemisferios del cerebro: el hemisferio izquierdo archiva y ordena información, mientras que el lado derecho la almacena en la memoria. Esto da como resultado ampliar las capacidades de aprendizaje. Por lo tanto es posible llegar a la conclusión de que gatear es absolutamente esencial para el desarrollo de las capacidades del cerebro tales como equilibrio, entendimiento, memoria, concentración, comprensión y percepción del espacio.
2. Desarrollo apropiado de las curvas vertebrales:
Al mirar una columna vertebral de perfil, debe tener 4 curvas: dos lordosis (una cervical y una lumbar) y dos cifosis (una dorsal y una sacral). Nacemos solamente con las cifosis; las lordosis en la columna cervical y lumbar necesitan desarrollarse durante la infancia, y uno de los principales factores de desarrollo de estas curvas es gateando. Cuando el niño comienza a gatear, lo primero tiene que levantar su cabeza; esto desarrolla los músculos del cuello y la lordosis cervical. Cuando el niño gana suficiente fuerza en el cuello y los brazos, él comenzará a sujetar su tronco, que directamente fortalece los músculos lumbares y desarrolla la lordosis lumbar.
Si estos pasos se saltan y el niño nunca gatea, las curvas vertebrales no se desarrollan correctamente y esto tendrá muchas consecuencias en la salud del futuro adulto, ya que estas curvas tienen muchas funciones importantes. Algunas de estas incluye la protección de la médula y nervios vertebrales, movimientos del cuerpo y la sujeción de la cabeza. Una pérdida de curvas vertebrales, especialmente en el cuello puede causar daños neurológicos severos. Recientes estudios científicos japoneses han revelado que una pérdida de la lordosis cervical provoca la muerte celular.
Gatear es una fase extremadamente importante. Es absolutamente necesario poner a los bebés en el suelo, con el fin de que aprendan a gatear y desarrollen activamente sus pequeños cuerpos y el sistema nervioso, con el objeto de convertirse en cuerpos saludables. Demasiados padres no ponen a sus hijos en el suelo por temor a que los pequeños se hagan daño o porque dicen que no están interesados en gatear. ¿Qué debes hacer? Despierta su interés, pon su juguete favorito delante de ellos, túmbate en el suelo y anímales a que te imiten. Estimúlales la necesidad de gatear, y diviértete con ellos.
Una de las peores cosas que puedes hacer es colocarles en la posición de pie en un taca-taca cuando no están listos para ello. Cuando un niño está preparado para levantarse, se levantará, no le metas prisa, porque si su estructura ósea y músculos no están preparados puede provocar problemas graves.
Primero necesitan gatear y cuando sus cuerpos y estructura ósea son lo suficientemente fuertes se levantaran. Si conoces a padres con hijos pequeños, dales esta información. Si conoces de personas jóvenes o mayores que no han gateado cuando eran bebés, han podido desarrollar problemas en el sistema nervioso y vertebral. Estos problemas pueden manifestarse a una edad temprana con males y dolores o pueden quedarse ocultos durante años. Estoy orgulloso de comunicaros que la Quiropráctica es la única manera de detectar y corregir estos problemas.