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Cuando te realizan un ajuste quiropráctico se logra corregir el desplazamiento de una vértebra que te ha estado produciendo dolor e irritando los nervios de tu cuello y de tu columna vertebral. Has estado sufriendo lo que se conoce como subluxación vertebral, quedando afectadas muchas funciones y actividades de tu cuerpo.
Una subluxación vertebral dificulta el funcionamiento normal de tus nervios y en consecuencia afecta a la labor de los órganos y articulaciones de tu cuerpo. Te invitamos a que leas este articulo hasta su final para que así logres tener una idea clara de qué hacer después de haber recibido un ajuste quiropráctico.
Después de tu primer ajuste quiropráctico puedes comenzar a sentir cambios en tu cuerpo visto que tu sistema nervioso se activa y produce energía en todo tu cuerpo. Escomo una especie de exaltación o euforia que harán que tu salud mejore. Esto se debe a la liberación de tensión que se produce en tu organismo y que no se ha correido en un período largo de tiempo.
Principalmente, debes hacer una vida normal y continuar cuidando tu cuerpo. No hay nada en concreto que tienes que hacer después de tu ajuste.
A veces el ajuste puede provocar una desintoxicación de tu cuerpo y podrías experimentar mareos, fiebre, dolor de cabeza, cefalea, somnolencia, entre otros. Esto se debe a la liberación de toxinas retenidas. No es malo; todo lo contrario: es tu cuerpo que se está limpiado de toxinas acumuladas durante años.
Además, al ajustarte, las vertebras de tu columna van a volver a su estado ideal, por lo que tus músculos, que han estado funcionando de manera incorrecta, se encontrarán un poco débiles lo que puede causar agujetas pasajeras. Esta sensación va despareciendo progresivamente.
En ciertos momentos vas a sentir mucha sensibilidad en algunas partes de tu cuerpo, incluso sentirás dolor en lugares donde tuviste algún tipo de lesión, tanto en el músculo como en el mismo hueso. No tengas miedo, este tipo de sensación es muy importante y se le conoce como “retracing”, la puedes tener ya sea después de un ajuste o durante un proceso curativo.
Una vez conocidas todas las sensaciones que vas a experimentar y una vez finalizada la primera sesión de quiropráctica, ten en cuenta las siguientes indicaciones:
Al empezar a sentirte con energía ten mucho cuidado y no empieces a cargar peso. Es aconsejable guardar reposo durante un día o seguir las indicaciones de tu quiropráctico. Asimismo, te recomendamos no realizar esfuerzos innecesarios y únicamente practicar ejercicios de estiramientos para que puedas mantener tus ajustes.
En caso de sentir somnolencia o cansancio muscular, vete a dormir y tómate un descanso durante todo el día. Igualmente, en caso de padecer cefalea, dolor de cabeza, fiebre, mareos, es importante que bebas mucha agua y no estresarte ya que estos dolores desaparecerán a lo largo de la jornada.
También existe la posibilidad de no sentir nada especial después de tu primer ajuste. No significa que tu cuerpo no está respondiendo. Muchos problemas son crónicos, y llevan desarrollándose en tu cuerpo desde hace años, lo cual significa que tu organismo necesita su tiempo para curarse. Si no sientes nada después de 1 solo ajuste, es normal; no te frustres. Más bien alégrate porque de igual manera tu cuerpo está en ese proceso de cambio para mejorar sus funciones y recuperar su salud.
Un ajuste dura el tiempo estrictamente necesario, no es muy largo. El trabajo del quiropráctico es el de localizar la subluxación y corregirla. Lo importante no es el tiempo en ajustarte, sino la precisión y la habilidad con la cual se realiza. En las manos de un quiropráctico experimentado con años practicando y realizando miles de ajustes, el proceso sólo tarda unos pocos minutos. Posterior al ajuste y durante varias horas, tu cuerpo y tu sistema nervioso seguirán trabajando con la información recibida durante la sesión.
En tu primera consulta el quiropráctico recogerá toda esa información vital sobre tu salud y tu cuerpo, con el fin de poder analizar mejor tu caso y así decidir si está en sus manos la posibilidad de ayudarte.
Dependiendo del estado y necesidad del paciente, el quiropráctico establecerá la cantidad de ajustes que deberás recibir, en definitiva, tu plan de cuidado para tu recuperación.
El número de ajustes necesarios depende de muchos factores y varia en función de las personas, tu edad, la antigüedad de tus problemas y lesiones, el grado de deterioro de tu columna… El propósito es que tu cuello y columna vertebral empiecen a ganar flexibilidad y movilidad, además de que tu sistema nervioso trabaje mucho mejor. En cada ajuste que recibes el quiropráctico busca reforzar ambos objetivos.
Recuerda que para corregir tus problemas necesitarás invertir tiempo. Debes tener paciencia, y sobre todo, ser constante para avanzar correctamente o no recaer. Dependiendo de cómo evoluciona cada persona, se adapta la frecuencia de sus ajustes.
Cuando finaliza la fase de reconexión, se comienzan a espaciar tus ajustes y se inica la fase de consolidación. En esta etapa los músculos se encuentran relajados, cada una de las vertebras de tu columna están bien alineadas y notarás que tu cuerpo evoluciona haciéndote sentir muy bien. Los tiempos entre ajustes se irán alargando.
Después de esta fase, empieza la etapa de integración.
Con frecuencia, los pacientes de esta etapa continúan recibiendo sus sesiones quiroprácticas para sentirse bien, le dan a su cuerpo un mantenimiento preventivo ya que desean seguir disfrutando de una buena calidad de vida. Las visitas durante esta etapa son generalmente quincenales, aunque dependerá mucho del paciente y de su rutina de vida (su trabajo, emociones, etc.)
No te debe alarmar porque este sonido ocurre por un cambio de presión en tus articulaciones, concretamente cuando se libera una burbuja de gas que se encuentra entre las articulaciones, llegando a escucharse como un chasquido. Lo mismo sucede con los dedos por ejemplo.
Esta disciplina innovadora poco a poco ha ido ganando terreno en el campo deportivo, ya que cuenta con una visión integral del organismo. Gracias a la quiropráctica se puede eliminar la subluxación vertebral, mejorar la comunicación entre el organismo y el cerebro sin que se registren interferencia alguna.
Con estos resultados los atletas han podido mejorar mucho en su rendimiento deportivo, los previene de lesiones graves y les mejora todo el funcionamiento del organismo de manera integral.
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es bueno