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En la consulta tengo un montón de pacientes que tienen huertas. La verdad es que me encanta cuando me cuentan sus historias de la huerta, que plantan sus patatas, que recogen sus guisantes, es un mundo que me gusta muchísimo.
La verdad es que una huerta es muy parecida al cuerpo humano y a nuestra salud, eso significa que para tener verduras, para poder tener una cosecha, tenemos que trabajar activamente en esta huerta, es decir, para tener una buena salud tenemos que trabajar activamente en nuestro cuerpo en el día a día para asegurarnos de que nuestro cuerpo está funcionando de la mejor manera posible.
Imagínate que te compras un trozo de terreno y quieres crecer tomates, guisantes, puerros, etc., la primera cosa que tienes que hacer es preparar la tierra, quitar las malas hierbas, plantar lo que vas a plantar y luego de manera regular tienes que ir a cuidar estas cosas y asegurarte de que están recibiendo suficiente lluvia, sol, hay que quitar las malas hierbas otra vez, asegurarse de que los bichos no se van a comer lo que está creciendo y si no haces todas estas cosas pues no vas a recoger nada o lo que vas a recoger será muy poco.
El cuerpo es exactamente igual, todos los días tienes que hacer cosas para asegurarte de que está funcionando de manera adecuada.
Todos los días tienes que hacer deporte, tener una dieta equilibrada, dormir suficientemente, no puedes esperar tener un cuerpo que funciona de manera adecuada sin hacer nada, eso es imposible, de la misma manera que no puedes esperar recuperar o recoger guisantes, patatas, puerros, coliflor o lo que sea en tu huerta si no vas a la huerta a trabajar y a cuidarla, si no preparas la tierra, si no plantas las semillas y si no vuelves para asegurarte de que todo está creciendo correctamente y que vas eliminando las porquerías que van a interferir con el crecimiento de tus verduras o lo que sea, no puedes esperar tener una patata en tu plato o no puedes comer una sopa al día siguiente, es físicamente imposible.
Además, otro factor que ocurre cuando estamos trabajando en una huerta es el factor de tiempo, es decir, hoy planto una semilla de tomates, ¿mañana voy a recoger los tomates para comérmelos? No. Sabemos que hace falta tiempo, esta semilla tiene que germinar y luego tiene que crecer una planta, luego tienen que salir las frutas, y estas tienen que madurar.
El cuerpo es exactamente lo mismo. Desgraciadamente, estamos acostumbrados a una sociedad microondas, es decir, queremos resultados enseguida y con nuestro cuerpo igual. A veces tengo personas que entran en la consulta que tienen problemas que tienen diez, quince, veinte años de antigüedad, tienen problemas crónicos y quieren estar mejor inmediatamente.
Por supuesto que quieren estar mejor de inmediato pero evidentemente hay que darse cuenta que todos estos problemas que se han ido acumulando durante veinte años, es decir, esta huerta que no hemos cuidado durante todo este tiempo, primero hay que limpiarla y luego hay que ir construyendo sobre esta base que tenemos. Entonces con tu salud, con tu cuerpo, es el mismo proceso, no puedes esperar tener resultados el primer día.
Es como si quisieras ir al gimnasio dos veces y ponerte como Arnold Schwarzenegger, es físicamente imposible. Necesitas una disciplina para obtener los resultados que quieres obtener, bien sea con tu huerta o con tu cuerpo. Hay una historia famosa de un cura que va pasando por el campo y ve un señor trabajando en la huerta y le dice: “Señor, Dios le ha regalado una huerta preciosa”, el señor le contesta: “Sí, es cierto, es preciosa pero la tenía que haber visto cuando la tenía para Él solo”.
Eso significa que este señor por supuesto que tiene una huerta preciosa pero no es por casualidad, ha trabajado duro para que esté así. Con el cuerpo es exactamente lo mismo. Una salud estupenda no es un regalo que viene del cielo, es algo que tenemos que cuidar de manera diaria para asegurarnos que nuestro cuerpo está funcionando de la mejor manera posible.
Nuestro cuerpo es como una huerta, lo tenemos que cuidar en el día a día, asegurándonos que estamos respetando ciertas pautas saludables para asegurarnos de que está funcionando de la mejor manera posible.