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Ayuda a recuperar el movimiento limitado de las articulaciones, estirar los músculos acortados, liberando los nudos y contracturas dolorosas, al tiempo que fortalece los músculos y recupera el movimiento natural de la estructura. Por medio de un programa especifico pueden tratarse las lesiones de rodilla.
La rodillarepresenta una de las principales articulaciones del cuerpo humano, en vista de que ayuda a realizar la marcha como a mantenerse en pie, pero la sobrecarga y el trabajo permanente pueden conllevar al desarrollo de una enfermedad en alguna de sus estructuras, ya sea el hueso, la rótula, los tendones, un músculo, un menisco o un ligamento.
Una de las condiciones más comunes de esta articulación es el chasquido de las rodillas que se produce al subir escaleras o caminar, el cual provoca una molestia o perturbación a la persona y puede tratarse de diferentes maneras, donde la quiropráctica puede ser de mucha ayuda.
El movimiento que realizan las rodillas en condiciones normales debe ser suave y no generar sonido o molestia alguna. Sin embargo, el chasquido suele aparecer cuando existen algunos roces a la hora de mover esta articulación, situación que puede presentarse por diferentes causas como:
Cualquiera de las condiciones mencionadas anteriormente se desarrolla cuando hay cierto grado de debilidad en el músculo, cuando la articulación sufre un traumatismo o se somete a mucho esfuerzo de manera constante.
En el caso de los traumatismos, éstos se deben generalmente a caídas accidentales, especialmente cuando se cae sobre las rodillas, así como golpes que se dan directamente en la articulación al tropezar con un objeto u otra persona. Esto último es muy común en quienes practican deportes de contacto como las artes marciales, el baloncesto o el fútbol.
Cuando hablamos de sobrecarga de la articulación, nos referimos a la presión a la que se somete, la cual está directamente relacionada con la obesidad o el sobrepeso, pues es una condición que suele provocar un desgaste considerable del cartílago articular, que también produce una erosión ósea.
Esto puede conllevar una deformación de la pierna como la desviación de la rodilla hacia afuera, las piernas arqueadas, que finalmente producen artrosis, una condición que produce mucho dolor, inflamación o edema en las rodillas.
Otra de las causas de la debilidad muscular en las rodillas es el sedentarismo, que hace que la rótula se desplace hacia afuera, se desgaste y provoque el famoso chasquido. También produce cierta vulnerabilidad a sufrir un esguince o una lesión en el ligamento colateral tibial o cualquier otro ligamento de la articulación.
En muchas ocasiones las lesiones de las rodillas están relacionadas con alteraciones que se presentan en otras áreas del cuerpo, como la cadera o la columna vertebral a escala lumbar.
Las lesiones más comunes en estos casos son las subluxaciones que se dan en los huesos de la cadera y las vértebras, ya sea por desgaste natural o por malas posturas. Esto genera una serie de desbalances que modifican la dinámica de los movimientos del cuerpo, afectando directamente las articulaciones de las extremidades inferiores como las rodillas.
Precisamente por ese motivo, los quiroprácticos se encargan de hacer una evaluación física del paciente de una forma exhaustiva, haciendo principal énfasis en la dinámica de los movimientos del cuerpo, con el objetivo de buscar el equilibrio de todas las alteraciones existentes.
Por medio de la quiropráctica se mejora considerablemente la propiocepción, por lo que el cerebro comienza a indicar a la persona cuando su equilibrio corporal no es el adecuado, al tiempo que se produce una disminución considerable del dolor, del chasquido de las rodillas y la limitación de los movimientos.
En este caso, los quiroprácticos llevan a cabo una serie de técnicas que permiten alinear todo el sistema óseo del cuerpo, logrando que el sistema nervioso funcione de manera adecuada y las articulaciones liberen las tensiones.